Como cada año, Severino, un joven vendedor ambulante que recorre las fiestas de los distintos pueblos del delta del Po, vuelve a Migliarino para vender sus baratijas y contar historias inverosímiles sobre el futuro y el progreso. Además de la bella Marina, aquí viven tres viejos amigos crédulos, jubilados que viven de la pobreza, a los que propone vender una hectárea de cielo.